Entre el 17 y 22 de diciembre los integrantes del proyecto “Impacto del cambio global sobre la fisiología de macroalgas antárticas: consecuencias para la producción primaria costera en escenarios de incrementada temperatura y radiación UV”, financiado por Conicyt e INACH, junto a las estudiantes premiadas en el Concurso de Microcuentos “La Antártica en 99 palabras” y sus profesoras participaron de un interesante experiencia científica en el fiordo Comau, Patagonia Norte.

El equipo de investigadores de la Universidad Austral realizó sus actividades en las dependencias del Centro Científico Huinay, dependiente de la Fundación San Ignacio del Huinay. Este centro es uno de los más importantes emplazados en la extensa Patagonia chilena. Después de 12 horas de viaje por hermosos parajes cordilleranos, montes nevados y la magestuosidad del fiordo Comau (o Leptepu), el grupo arribó al centro de investigación para desarrollar labores científicas, así como en la prueba de instrumentos que serán utilizados en la segunda campaña antártica que comenzará en enero del 2014.
Durante la estadía de trabajo se realizaron diversas actividades de campo, en las que participaron el director del proyecto Dr. Iván Gómez, la Dra. Pirjo Huovinen, los biólogos marinos María José Díaz y Jorge Holtheuer, la prof. Lilian Villanueva, acompañados por las estudiantes Yusset Valero (Colegio Helvecia) y Gabriela Núñez (Instituto Inmaculada Concepción), con sus profesoras Paola Vera y Sandy Milling respectivamente.

Se trabajó en la recolección de algas desde la zona intermareal, se midió intensidad de luz en la columna de agua, se realizaron incubaciones a radiación UV de especies dominantes (Macrocystis, Gracilaria, algas verdes) mediante buceo autónomo se estudió la biodiversidad, cobertura, distribución así como documentación fotográfica y de video submarino de las comunidades de macroalgas existentes en el fiordo Comau. Las estudiantes y sus profesoras fueron parte de estas actividades y además confeccionaron algarios con las especies colectadas, realizaron entrevistas a los lugareños y plasmaron sus impresiones en un ensayo.
En esta oportunidad, el grupo compartió con científicos de otros países quienes se encontraban en el centro científico.
El objetivo de la expedición se cumplió exitosamente ya que se dieron condiciones óptimas para el buen desarrollo de este trabajo en terreno. De esta forma se ha dado comienzo a una investigación que busca develar los secretos de una flora marina hasta ahora ignorada y que, en el contexto del cambio climático, puede entregar respuestas muy valiosas.

Fuentes: Coordinación FAE Zona Sur/Universidad Austral de Chile e INACH.